jueves, 27 de marzo de 2014

Banderas Republicanas y Manis.

Últimamente estamos viendo en centenares de manis (manifestaciones, para los menos progres), protestas, huelgas y demás aspavientos socio-político-laborales el uso de la mal llamada “Bandera Republicana” o “Tricolor”. Ciertamente, aquellos que apuntan al uso de esta bandera para oponerse al orden constitucional, pues… aciertan, ya que esta enseña, sin ser ilegal (tampoco lo sería la rojigualda con el águila de San Juan), pudiera en cierto modo considerarse como una oposición al sistema político actual. Sin embargo, ambas lo serían si fueran izadas en un edificio oficial, eso sí que sería totalmente ilegal. Normalmente estos personajillos de la progresía patria confunden, entre otras muchas cosas, lo “legal” (estas dos que he mencionado) con lo “Oficial”, es decir, la rojigualda que establece nuestra constitución.
Manifestaciones con banderas de la II República
Hace ya unos meses escribí un artículo que pueden consultar aquí sobre el manido asunto de las banderas de esta bendita tierra. Tierra, por cierto, y vuelvo a reiterarme, en la que no caben más tontos, vamos… que si aparece alguno más nos caemos al mar por los lados. No obstante, los politiquillos deberían tomar nota de esto, se empieza agitando una banderola tricolor, como en las ferias y acabamos como ya saben uds.
Resulta que estos agitadores de banderas, ¡ojo! he dicho de banderas, desconocen lo que están portando. Hace unos meses, en una mani de funcionarios me acerque a uno de estos pajaritos y le pregunto, ¡oye! ¿porqué traes aquí esa bandera?, y va el payo (funcionario él) y me dice cargado de razones, ¡es que esta es la bandera republicana!, y añade con cierta saña, ¡la verdadera!. Pues bien, supongo que este individuo habrá aprobado una oposición, por tanto debería saber lo que se dice, pero no… ni puta idea. Repite y cacarea lo que ha oído y lo peor es que además lo da por cierto. En fin… un iletrado más de la administración que nos administra. Llegado a este punto debo aclarar que yo también soy funcionario, pero de los que si no saben lo que dicen, mejor… se callan. Por cierto, a la próxima mani de funcionarios me llevo mi bandera del madrí, con dos c…
Bandera de la I República (1873-1874)
Este hombre, como muchos otros, desconoce que hubo una I República que tenía como oficial la bandera rojigualda, no entraremos en los escudos que es mucho más complejo. Así que, en todo caso, la tricolor será la bandera, única y exclusivamente de la II República, nada más. Pero claro, ahora viene la segunda parte, estos creen que ser republicano es, pásmense, ser de izquierdas, cuando tanto en la I como en la II República hubieron también gobiernos conservadores.

He mencionado escudos y no puedo por menos que referirle una anácdota curiosa que me ocurrió cuando visitaba, hace apenas dos o tres años, el Alcazar de Segovia. Verá, cuando pasábamos por la llamada Sala del Trono, veo una joven pareja, él con rastas y ella vestida toda de negro, que hace el siguiente comentario: dice él, ufff mira el escudo con el águila, no sé como no lo han quitado todavía, a lo que ella le responde, Fulanito (no recuerdo el nombre) ese es el escudo de los Reyes Católicos. Entonces recuerdo que pensé... ¡oye, lo mismo aún hay esperanza!. El tonto de las rastas, no por las rastas (que cada uno lleve lo que le dé la gana), sino porque era tonto, dice... es igual, yo lo quitaría. Fin de la anécdota.
Pues eso, resulta que ya se ha convertido en habitual el uso de esta banderita en los pronunciamientos reivindicativos, en los que no estaría de más que apareciera también alguna bandera española “oficial” ya que al fin y al cabo son españoles los reivindicadores ¿no?. Pero, ¿saben? resulta que exhibir esa bandera “es cosa de derechas” y algún progreburro, que siempre los hay en estos saraos, pueden buscarte un lío. Así que le aconsejo que se lleve ud. una bandera con la Cruz de Borgoña, esa con el aspa roja sobre fondo blanco, que también fue enseña nacional durante más de 300 años y, como la culturilla de estos personajes es escasa, por no decir inexistente, pues dirán… ¡mira, uno con la bandera de la cruz roja!, y se quedan tan anchos.
Bandera Milicias Nacionales (1813)
Luego están los otros, que van de algo más... ilustradillos, y sueltan, ¡es que la roja y amarilla (no dicen rojigualda por si les sale un sarpullido en la boca) es la bandera monárquica!. Pssh, que quieren que les diga, pues queeee… tampoco. Asombra el grado de analfabetismo histórico, ¡oiga! si hasta la Milicia Nacional de las Cortes de Cádiz de 1812 –liberales ellos- portaban una bandera rojigualda, ¡Oiga! 23 años antes de que la estableciera el Real Decreto de Isabel II, ¡Oiga! que las monarquías tenían y tienen su propio estandarte, ¡Oiga! que en la I República, también la enseña era bicolor. Miren, como me estoy indignando, dejen que les ponga estas líneas:
La bandera (rojigualda) que teníamos los españoles no era monárquica sino nacional. La bandera de los Borbones fue blanca; la bandera real era un guión morado”
El pueblo no anhelaba incorporar a la bandera el color morado de Castilla. No podía anhelarlo porque la masa del pueblo español ignoraba que el morado fuese el color de Castilla (...)”
Hay un manifiesto artificio. La injusticia de las persecuciones nada tiene que ver con los colores de la bandera de España. Algunos se apoderaron del grito de ¡Viva España! y se colgaron en sitio bien visible un crucifijo para proceder en nombre de Dios y no por eso los españoles debemos dejar de gritar ¡Viva España! ni los que sean católicos o sean protestantes deben renegar de la moral cristiana”.
Tte.General Vte.Rojo
Este texto, que los progres, sí, ¡exacto!… los iletrados y los otros, censurarían por derechoso y fascistoide fue escrito, nada más y nada menos, que por el Teniente General Republicano Vicente Rojo, defensor de Madrid ante el ejército sublevado y Jefe de Estado Mayor del Ejército Popular de la República, pero ante todo, un español orgulloso de serlo que quiso reflejar en este artículo su sabiduría histórica y el profundo amor por su patria.
No debemos dejarnos arrastrar por el hijoputismo primario, y la severa miopía política de los dirigentes y gobernantes, sean de derechas o izquierdas, que estúpidamente acomplejados desde 1975 por nuestra historia, se resisten a reaccionar ante el nuevo avance de la gilipollez endémica que tras la transición parecíamos haber superado.
Pues… ¿qué quieren que les diga?, servidor tal como Vicente Rojo, como Unamuno y tantos otros, olvidados o no leídos suficientemente, no me resigno a tolerar tanta estulticia (por si esto lo lee algún portatricolor, significa ignorancia o tontería) y tanta falacia (eso lo buscas en el diccionario… majo).

No soy un especial reverenciador de la enseña nacional, o sí, pero lo cierto es que las sociedades precisan incuestionablemente símbolos de unión. Por ello, envidio sanamente el respeto que en EEUU se tiene a su bandera, la de las barras y estrellas, incluso en los estados del sur que la combatieron en una cruenta guerra de secesión. No son los yanquis precisamente un ejemplo a seguir, pero en esto… no lo duden.

Muchas gracias por seguirme.
La Doctrina Imperfecta.